Recuerdo
ese sol asesino
recuerdo
amaneceres,
de
mi piel enrarecida por esa fiebre
que
ingiere vida sin alma, vida sin latidos,
recuerdo
tus mejillas arreboladas
bajos
mis dedos que no cejaban
de
trazar surcos de amor en tu alma,
recuerdo
tus caricias en mi mirada
de
tus ganas de soñarme en cada despertar
ungiendo
este mi cuerpo con tu amar,
recuerdo
el grito agónico de tu marchar,
el
aleteo de esa mariposa en mi vientre
dulces
e inquietantes huellas en mi pesar,
recuerdo
tus lagrimas perennes
cuando
mi alma se olvido, de vivir, de soñar,
y
el amanecer fue un imposible recuerdo,
recuerdo
tu aroma, ¡ oh mi vida !
en
él me envuelvo cada noche fría,
bajo
esta mi morada eterna
tu
recuerdo es mi muerte cada día.
Arwen
Es un poema precioso,,, muy bello.
ResponderEliminarHay recuerdos que solo son eso recuerdos, escenas del ayer que nunca se repetiran,,, pero que siempre serán guardadas en nuestra memoria...
Un cálido beso querida Arwen.
Buenas Lunas Damas Samantha y Arwen, Les doy un fuerte aplazo a su publicado.
ResponderEliminarEste poema evocativo me ha entusiasmado...tienen tu firma y se nota...un besote preciosa.
ResponderEliminarLa pasión inunda cada una de las lineas de este escrito.. me encanto =)
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